La piel de esta zona es mucho más fina y frágil que la del rostro, por lo que es habitual que muchas personas a partir de cierta edad puedan llegar a tener un cuello arrugado y flácido debido a múltiples factores. Su continuo movimiento hace que los síntomas del envejecimiento sean mucho más visibles y pronunciados en esta área y que comiencen a ser visibles a edades más tempranas, incluso en cuellos jóvenes, especialmente a partir de los treinta años. ¿Quieres saber cómo prevenir los síntomas del envejecimiento de la piel y las arrugas en el cuello?
¿Por qué surgen las arrugas en el cuello?
El cuello es una de las zonas más expuestas a la formación de arrugas. Surgen debido a la progresiva flacidez del cuello derivada de la pérdida de elasticidad y firmeza de la piel como consecuencia de la disminución de elastina y colágeno que se produce con la edad.
Existen diferentes tipos de arrugas en el cuello, con causas también dispares. Las más pequeñas son el resultado de los daños de las capas superficiales de la piel y las más profundas suelen estar relacionadas con los problemas derivados de la edad. Puede tratarse de arrugas horizontales como las denominadas transversales o anillos de venus que se van acentuando con el paso del tiempo. Mientras que las arrugas verticales son aquellas que tienen su origen en el proceso de flacidez del cuello, apareciendo arrugas en cuello de personas jóvenes.
Las causas subyacentes que influyen en la formación de las arrugas son muy diferentes: la predisposición genética y hereditaria que influyen en la elasticidad y firmeza natural de nuestra piel. También la cantidad de cuidados que se dedican a esta zona o una mala higiene postural como pasar demasiado tiempo con la cabeza inclinada sobre el teléfono móvil. Otras causas son la excesiva exposición al sol; no hacer ejercicio o malos hábitos como el tabaquismo son algunas de estas causas.
Prevenir las arrugas en el cuello
No se puede impedir totalmente la aparición de las arrugas en el cuello derivadas del envejecimiento de la piel. Sin embargo, sí se puede prevenir y disminuir considerablemente su presencia, eliminando incluso algunas de las más superficiales con una rutina de cuidados adaptada.
Es importante comenzar a prevenir desde la juventud para evitar algunos de los cambios en la piel durante el envejecimiento y que comienzan mucho antes.
Hidratar y exfoliar tu piel
La sequedad de la piel está relacionada con la aparición de arrugas y de manchas en el cuello y en el escote. Es importante exfoliar la piel para liberarla de impurezas y agentes contaminantes y utilizar una loción o crema hidratante que aporte y retenga el líquido en la dermis de nuestro cuello, ayudando a conservar su firmeza y elasticidad natural. Una que contenga ácido hialurónico es perfecta por las propiedades de este componente en relación a la retención de líquidos.
Proteger la piel
Usar productos fotoprotectores de amplio espectro y alta protección contra los agentes externos como los rayos del sol o la polución es fundamental para mantener durante más tiempo la textura y la piel del cuello joven. Evitar la sobreexposición al sol y a otros agentes nocivos ayuda a prevenir la aparición de manchas y la sequedad excesiva que está en el origen de muchas de estas arrugas.
Cuida tu cuello durante el descanso
Mientras dormimos muchos músculos y tendones se relajan. Utiliza una crema facial de noche que ayude a paliar y prevenir los signos del envejecimiento del cuello.
Retinol 0.3 es una crema de noche que contiene una gran cantidad de retinol puro, una vitamina liposoluble que ayuda a reducir la apariencia de las arrugas y la hiperpigmentación debida a los agentes externos o al envejecimiento de la piel. Contiene también bisabolol, derivado de la camomila, que contribuye a rejuvenecer el cuello y a regenerar las células para darle un aspecto más joven, terso y saludable.
A su vez, Tripeptide R-Neck Repair es un tratamiento con alta eficacia para combatir los signos de edad en el cuello que puede aplicarse con movimientos ascendentes cada dos noches durante la primera semana. Es una crema apta para todo tipo de pieles (normal, mixta, grasa) y que contribuye a reafirmar el cuello y a suavizar las líneas horizontales, la flacidez y la acumulación de grasas. Su fórmula sinérgica, especialmente diseñada para tratar la piel del cuello, contiene activos dermatológicos de gran eficacia. Esto se debe a que cuenta con un 0,2% de retinol puro derivado de la vitamina A que ayuda a la renovación celular, minimizar las imperfecciones y corregir la hiperpigmentación. Cuenta también con un 2,5% de tripéptidos concentrados que ayudan a reducir la apariencia de las líneas del cuello y un 5% de complejo de glaucina, derivado de la amapola amarilla que colabora en dotar de resistencia a la piel.
Haz ejercicios para fortalecer tu cuello
Seguir una rutina de ejercicios básicos para fortalecer los músculos del cuello y escote e implementar su elasticidad y firmeza contribuye a retrasar y eliminar algunos síntomas del envejecimiento cutáneo. Dedica 15 minutos al día a ejercicios sencillos como mover la comisura de los labios, sacar la lengua o elevar la mandíbula hacia arriba para ayudarte a fortalecer el cuello.