La arcilla es uno de los productos de belleza más populares hoy en día y no es en vano. Tiene increíbles propiedades desintoxicantes, depurativas y calmantes para la piel del rostro; además, existen tantos tipos de arcilla, cada uno con beneficios únicos, que te resultará difícil quedarte con una.
¿Qué es la arcilla?
La arcilla la puedes encontrar en forma de mascarillas faciales que se emplean como exfoliante natural. Los productos hechos con arcilla se utilizan para purificar, regenerar y limpiar la piel del rostro, a la vez que la dejan suave, tersa y con una sensación inmejorable. La arcilla para la cara puedes encontrarla en diferentes colores; cada color está indicado para situaciones específicas, pues cuentan con propiedades únicas que permiten diferenciarlos unos de otros.
¿Por qué usar arcilla? Como sabes, la piel del rostro se encuentra expuesta todos los días a diferentes agentes externos que hacen que la dermis se deteriore con el paso de los años. A la cabeza de estos factores externos se encuentra la radiación solar en sus distintas formas, así como el viento, la contaminación ambiental, el polvo y los cambios de temperatura. Además, sobre la piel del rostro también influyen la edad, la genética y el tabaco. Todos estos factores pueden ocasionar alergias, irritaciones, manchas y envejecimiento precoz; que hacen que la piel no se vea bonita, suave y tersa.
Durante la juventud estos factores pasan casi desapercibidos; sin embargo, con la edad las repercusiones comienzan a hacerse palpables. ¿Cómo? A través de las manchas, las líneas de expresión y arrugas prematuras, falta de hidratación, descamación, irritación, picores, etcétera.
Para ayudar a contrarrestar estos daños, no solo es indispensable seguir una rutina de belleza diaria que incluya hidratantes y crema de protección solar, sino también mascarillas como la de arcilla. Si te estás preguntando por qué es tan buena la arcilla, debes saber que este ingrediente es rico en minerales como silicio, calcio, hierro, aluminio, sodio, potasio, calcio y zinc. Gracias a estos minerales, la arcilla adquiere diferentes tonalidades y los beneficios son diferentes. Por ejemplo, la arcilla contribuye a mejorar la textura de la piel.
¿Ya sabes cuál vas a escoger? Te invitamos a conocer las propiedades de los diferentes tipos de arcilla.
Tipos de arcilla según tu tipo de piel
Para las pieles grasas
La mascarilla de arcilla verde se recomienda para las pieles grasas, pues tiene altas concentraciones de magnesio y óxidos de hierro ferroso. Esta mezcla hace que la arcilla verde tenga propiedades astringentes, elimina impurezas, limpia la grasa a profundidad y es muy fácil de absorber.
¿Piel sensible?
Para las pieles sensibles, la arcilla rosa es la mejor apuesta. Se trata de una mezcla de arcillas blanca y roja. Las mascarillas de arcilla rosa son ricas en hierro y oligoelementos, tienen características muy absorbentes y no son abrasivas. Además, este tipo de arcilla tiene propiedades antiinflamatorias y antisépticas, favorece la circulación y el drenaje interno. A la vez que ayuda con la cicatrización y alivia las pieles dañadas. Si tu piel es sensible y propensa a la irritación y rojeces, esta mascarilla te ayudará a restaurarla a la vez que aporta sensación de calma.
Por otra parte, la arcilla rosa ayuda a combatir el envejecimiento al regenerar el colágeno y la elastina. También tiene efectos despigmentantes, por lo que es ideal para disimular las molestas manchas de la piel ocasionadas por el sol o las cicatrices.
¿Piel seca?
La mascarilla de arcilla blanca se recomienda para las pieles secas, pues tiene grandes concentraciones de aluminio. La tonalidad blanca la adquiere porque se dice que es una arcilla lavada (pasada por aguas). Es por esto que es el mejor aliado de la piel seca, aunque también pueden utilizarla las pieles sensibles.
La arcilla blanca contribuye a la hidratación de la piel, pero también es buena para aportar sensación de calma.
¿Qué mascarilla utilizar?
Clarifying Clay Masque de SkinCeuticals puede ser tu mejor aliada para mejorar la apariencia de la piel. Este es un tratamiento purificador que contribuye a la descongestión de los poros, mientras elimina el exceso de grasa en la cara. Si estás buscando una mascarilla de limpieza y detoxificación profunda, Clarifying Clay Masque es tu mejor opción. Este producto combina dos arcillas naturales, el caolín y la bentonita, que contribuyen a la eliminación de las impurezas a la vez que actúan sobre los poros descongestionándolos.
¿Lo mejor? Que pueden utilizarla todos los tipos de pieles y aquellos que tengan puntos negros, imperfecciones, textura irregular y piel apagada. Puedes utilizarla una vez a la semana y con ello reducir los brillos y afinar la textura de la piel. Su fórmula, además de arcillas naturales, cuenta con una combinación de hidroxiácidos al 2% que exfolian con suavidad. A su vez, tiene activos botánicos que contribuyen a suavizar la piel y aportar sensación de calma.
Si además vas alternando esta mascarilla con la Hydrating B5 Masque, podrás obtener resultados finales muy óptimos. Ya que gracias a su alta concentración de ácido hialurónico y vitamina B5, hidrata y restaura la piel en profundidad.
Hydrating B5 Masque es una mascarilla en gel semanal diseñada para hidratar profundamente y restaurar los niveles de hidratación de la piel. Apto para todo tipo de piel, esta mascarilla contiene un complejo exclusivo que imita el factor de hidratación natural de la piel, mejorando la hidratación en las áreas necesarias. Con altas concentraciones de ácido hialurónico y vitamina B5, deja la piel suave y elástica. Se puede aplicar en el rostro y otras zonas secas como cuello, escote, manos, rodillas, codos y pies. Un tratamiento esencial para mantener la piel en óptimas condiciones.